lunes, septiembre 24, 2007

Un sublime recuerdo... de una eterna amistad.


Así partiste aquella noche carente de estrellas,
Mas repleta de emociones por sentir...
Así te marchaste, dudándolo todo,
Sintiéndome allí.

Y es que cada instante pasa,
Sin temor a arrepentirse...
Ante aquella amistad,
Cuestionablemente subjetiva.

Así lograste lo que sin saber que tenias...
Querías conseguir,
Así marchaste hacia un mañana...
Que jamás será porvenir.

Y es que ya me falta el aire...
Ya no puedo respirar,
Pero solo me contengo...
Por que se que volverás.

¿Corazón, ya te vas? ...
¿Como aquel que se marcha sin mirar atrás?
No lo creo mírame bien...
Que de talvezes hay mil porqués.

No me pregunto si volverás...
Solo saber si recordaras,
No me despido, no tengo valor...
Como aquel que se marcha sin decir adiós.

4 comentarios:

Galileus dijo...

Querida "Lunettas", siento angustia en tus palabras; tu corazón extraña esa amistad que ha calado tan profundamente en ti.

Sabes?... A veces pienso que nuestro corazón tiene que pasar por esas cosas para enseñarnos lo vulnerables que somos y para crecer a partir de esa sensibilidad...

Gracias por compartirlo!

Lunettas dijo...

Si hay angustia, hay amor de por medio... eso tenlo por seguro, te das cuenta que quieres algo cuando te preocupas por ello y te duele en lo mas profundo del alma.

Nuestro corazón pasa por millones de pruebas a diario, que o lo debilita o lo hace fuerte.

¡Gracias a ti por seguir por aqui!

Besos

Lunettas *_~

Pedro Genaro dijo...

Lunettas...si recuerda...ya regresó!

Lunettas dijo...

Así es solo que muchas veces nos resistimos a verlo...
Besos

Lunettas *_~